Cada pieza gráfica que vayamos a diseñar e imprimir debe ser pensada teniendo en cuenta sus características particulares y el objetivo específico al que apunta, y esto tiene que estar presente en cada paso del proceso: desde la elaboración de la idea hasta la elección del papel en el que se va a imprimir.
En folleto es, ni más ni menos, que la carta de presentación de una empresa o de un producto, donde se muestra una información determinada que queremos dar a conocer. Además de informar, nos sirve para transmitir o reforzar la imagen de la marca.
Los folletos tienen que ser llamativos, interesantes y con un buen diseño gráfico. La intención principal es que, con una sola mirada, inviten a la lectura, ya que tenemos solo un instante para captar la atención de nuestro público. Por eso, es importante que contengan elementos gráficos o informaciones que supongan un valor añadido a la publicación.
Un folleto es un trabajo gráfico reducido y ocasional, muy diferente en su uso y en su extensión a un libro, una revista o un catálogo. Estas características propias y específicas, a medio camino entre el cartel y el catálogo, permiten un diseño distinto al de otros trabajos gráficos.
La elección del tamaño y del tipo de plegado condicionará la organización del contenido y la distribución de los elementos gráficos que compongan el folleto, lo que influye en su aspecto espacial.
Según la cantidad de elementos que se quieran incluir —como textos, fotos y gráficos—, el público al que va dirigido y el presupuesto con el que se cuenta para su elaboración, se procederá a escoger el tamaño apropiado, los materiales o acabados, y el tipo de plegado. La correcta selección del papel y sus características técnicas son de suma importancia en esta operación, ya que inciden directamente en la formación del doblez.
Con formatos cuadrados o rectangulares, sus tamaños más comunes están comprendidos entre A6, A5, 10×21 y A4 como tamaño máximo. Según el número de páginas o cuerpos que posean, los tipos de folletos son los siguientes:
- Hojas, volantes o flyers: Constan de una sola hoja sin plegar, impresa en una o en ambas caras.
- Dípticos: Folletos plegados en 2 cuerpos (4 páginas).
- Trípticos: Folletos plegados en 3 cuerpos (6 páginas).
- Cuadrípticos: Folletos plegados en 4 cuerpos (8 páginas).
- Polípticos: Folletos de más de 4 cuerpos.
También dependiendo de nuestro presupuesto y del objetivo al que se va a destinada la publicación, podemos utilizar papeles especiales, que darán a nuestro folleto un aspecto diferenciador. Lo importante es saber elegir los tipos y materiales del folleto, dependiendo del objetivo al que va destinado.
En D&R tenemos los equipos y los insumos para que tus folletos marquen la diferencia. ¡Contactanos!
Contenido producido originalmente por FastForward Concepts para D&R Servicios S. A.